El periodismo ha sufrido grandes cambios desde sus inicios hasta lo
que es hoy en día. En la actualidad, ya no vale sólo con aparecer en la
televisión durante tu programa y ser visible para la audiencia durante
ese breve periodo de tiempo. Lo que prima ahora es ser accesible las 24 horas
del día y que tus seguidores o lectores puedan interactuar contigo cuando les
plazca.
Para facilitar esa conexión entre los usuarios y los periodistas
existen numerosas plataformas en la red que permiten la interacción con un par
de clicks. No formar parte de ninguna de ellas supone ser invisible para la
sociedad, un privilegio que muy pocos pueden permitirse en los tiempos que
corren.
Pero como nosotros no formamos parte de ese selecto grupo tenemos que
estar en la mayoría de las redes sociales para mejorar nuestra marca personal y darnos a conocer. Ya sea
mediante Twitter, Facebook, Instagram, LinkedIn, Tuenti o Flickr, da
igual, pero la audiencia ya no se conforma con recibir la información, quiere
ser parte de ella, aportar su opinión.
Twitter quizás sea el ejemplo más claro de esa unión entre el
informador y sus seguidores. Gracias a esta red social todos nuestros followers
pueden conocer nuestros trabajos y logros, además de ciertos aspectos de
nuestra vida que queramos compartir y que nos vuelven más cercanos a nuestro
"público".
Por lo que es importante que nosotros,
futuros periodistas, formemos parte de esta plataforma y sepamos cómo funciona,
puesto que es una de las herramientas básicas del periodismo actual y futuro, y
que permite darnos a conocer con un simple retweet. Mario Tascón, periodista y experto en nuevas tecnologías, por ejemplo, no se
fía de los periodistas que no están en Twitter y considera que “un redactor sin
Twitter y sin Facebook no tiene lugar en los medios”, lo que hace inconcebible
que no formemos parte de estas redes sociales.
En lo que respecta a Facebook, la gran
red social por excelencia, hemos de decir que va mucho más allá que Twitter, en
el sentido que no sólo compartes información, citas, o datos personales, sino
que además se pueden ver todas la fotos que "se cuelgan", siempre y
cuando el usuario lo permita, así como mantener una conversación mediante la
opción del chat. Además, Facebook también ofrece la posibilidad de crear
páginas o grupos, en los que se intercambian opiniones e información de temas
determinados. Aunque lo que distinguió a Facebook del resto desde un primer
momento fue el botón "Me Gusta" con el que se valoran las fotografías
que los usuarios tienen en sus perfiles.
Instagram, la red social que ha
experimentado una de las mayores crecidas en menos tiempo (se creó en octubre
de 2010 y hoy en día cuenta con 100 millones de usuarios), básicamente consiste
en un programa para compartir fotos (y vídeos desde hace unos meses) con los
usuarios. Una de las principales características que nos ofrece, es que permite
compartir las imágenes que "subimos" con otras redes, como Facebook,
Twitter o Tumblr, y además posee una gran variedad de filtros para hacer
retoques de dichas imágenes.
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